En la actualidad parece adecuado integrar en el espectro de trabajador independiente no sólo al freelance, sino también a quienes viven de su propio negocio, a los informales y a los que contestan a este tipo de encuestas con un sospechoso: “trabajo desde mi casa”, sin que nunca se sepa exactamente qué hacen.
Sin embargo, es cierto que el trabajo freelance está creciendo de forma expansiva: de 2016 a 2017, hubo un incremento de la aceptación de este tipo de trabajo en las empresas, el cual pasó del 29 al 33 por ciento, según la firma Regus y el diario El Financiero.
Mientras en América del Norte y Europa ya se tiene una adaptabilidad casi completa a este tipo de colaboradores –80% y 85% de aceptación, respectivamente--, en Latinoamérica las encuestas están alrededor del 60%.
“En Latino América estamos un paso atrás, pero sí, definitivamente, vemos un empuje estos últimos años para estar pronto a esos niveles. Este tipo de trabajador tendrá un gran reconocimiento por parte de los empleadores”, asegura Chopin.
Tanto el trabajador independiente como el que opera con contrato de trabajo por tiempo definido presenta ventajas claras frente a las formas más convencionales:
- Flexibilidad. La apertura de horarios no es la única ventaja para el trabajador freelance, sino también la oportunidad de implementar su propia forma de trabajo y cambiar de espacio (desde rentar una oficina, trabajar desde la comodidad de su hogar o desde alguna playa soleada), si es que las funciones propias del proyecto se lo permiten.
- Detona arranques de operación. Las dos modalidades de trabajo que aquí se explican permiten a las nuevas empresas arrancar operaciones u optimizar sus operaciones en el país. Si la unidad empresarial aún no tiene la estructura legal o el organigrama completo, puede valerse de este tipo de esquemas.
- Mayor productividad. Los trabajadores independientes y por proyecto se distinguen por llevar su productividad a niveles muy elevados, de ahí que se puedan volver más necesarios que el oficinista común.
- Experiencia. La especialización de quienes trabajan por su cuenta es otro punto fuerte. Al estar involucrados en un mayor número de proyectos, recogen rápidamente la experiencia que, en el trabajo convencional, podría llevarles el doble o triple de tiempo.
- Genera oportunidades de trabajo. Quienes se contratan por tiempo definido muchas veces reciben ofertas importantes para quedarse a trabajar en las empresas. Los reclutadores también pueden aprovechar este esquema para ahorrarse un periodo de prueba, tanto de proyecto como de personal, y seleccionar al candidato perfecto.
Contacto:
Si nuestros servicios se acoplan a tus necesidades, mándanos un mail dándo clic a las siguientes direcciones y con gusto te atenderemos:
mariamartorano@pageinterim.com.mx & clairechopin@pageinterim.com.mx